La primera receta de esta semana es ideal para picotear, con los bocaditos de patata y jamón serrano que vamos a preparar sorprenderás a grandes y pequeños. Si tus jornadas están repletas de actividades no te preocupes, su elaboración es muy sencilla y rápida por lo que puedes hacerlos igualmente aunque no dispongas de mucho tiempo para cocinar.
Mis bolitas de patata son una receta de aprovechamiento, he reciclado unas cuantas patatas cocidas que tenía sobrantes, me irrita muchísimo que los comestibles terminen en el cubo de la basura y procuro transformar los restos en nuevos platos. Con pequeñas cantidades de comida que van quedando, y una inmensa imaginación, podemos hacer maravillas.
Estas croquetas de puré de patata con jamón les encantan a los niños, la forma redonda y su pequeño tamaño las hacen muy atractivas para ellos, hazlas en cuanto tengas oportunidad, se las comerán encantados.
BOCADITOS DE PATATA Y JAMÓN CON SALSA DE PIQUILLOS Y MIEL
INGREDIENTES / PREPARACIÓN (salsa de piquillos y miel):
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1 bote de pimientos del piquillo en conserva de 340g
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50ml de miel
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10ml de vinagre de Módena
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Escurrir los piquillos, ponerlos en un vaso batidor y triturarlos. Reservar el líquido por si fuese necesario.
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Vaciar el puré de pimientos en una cazuela, añadir el vinagre y la miel.
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Cocinar la salsa, destapada y a fuego lento, durante 15/20 minutos. Remover con frecuencia para que no se pegue.
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Comprobar la textura, si ha quedado demasiado espesa aligerarla con el líquido de los pimientos hasta lograr el punto deseado.
INGREDIENTES / PREPARACIÓN (para 24 bocaditos de patata dependiendo de su tamaño):
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400g de patatas cocidas
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100g de jamón serrano
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150g de cebolla
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50ml de aceite de oliva
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Harina y huevo (para rebozar)
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Aceite de oliva (para freír)
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Calentar 50ml de aceite. Sofreír la cebolla y el jamón, picados finamente, hasta que estén dorados. Ponerlos en un colador para escurrir el exceso de grasa.
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Aplastar las patatas cocidas con un tenedor hasta hacerlas puré, añadir el sofrito de jamón y mezclar bien.
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Con la masa obtenida formar bolas, del tamaño deseado, rebozarlas en harina y huevo batido.
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Freírlas en abundante aceite caliente hasta que estén doradas y retirarlas sobre papel absorbente.
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Servir los bocaditos de patata acompañados de la salsa de piquillos y miel.
Con unas croquetas de patata como estas quedarás de lujo ante tus comensales, son adecuadas para cualquier ocasión, tenlas siempre presentes porque son un delicioso bocado.
Para contrastar me apetecía acompañar los bocaditos de patata con alguna salsa agridulce, en mi lista de recetas pendientes la encontré, estaba guardada desde que la vi en esta web. Me había olvidado que la tenía, te diré que me arrepiento muchísimo de no haberla hecho antes, está para chuparse los dedos, se queda conmigo eternamente.